A ambos lados de la autovía A8 se encuentran las áreas de Anero, han estado cerradas durante algún tiempo pero ahora las han reabierto con cámaras de seguridad. Siempre han sido unas de las de más mambo que he conocido, hasta el tío que se encargaba del mantenimiento le iba el mambo y, cuenta la leyenda urbana, que el hijo le dio una somanta de palos que le dejó para el arrastre cuando se enteró que en sus trabajo aparte de mantener las áreas se encargaba de mantener los bajos de los que paraban, como veréis un curro de lujo para muchos. Lo del hijo me lo han contado lo otro lo sé porqué siempre que he parado allí a horas laborales estaba el tío en posición de ataque. Pero volviendo al tema deciros que da igual que haya cámaras o no, he pasado pronto dirección a Bilbao, era muy pronto en serio, y en el área que está dirección a Bilbao había un tío en furgoneta y un paisano en coche, en condiciones normales no hubiese parado pero como ahora tengo que contar las cosas que me encuentro he parado. Estaba claro que la espera de los dos estaba a punto de cuajar, es decir, que, aunque aparentemente no se gustaban la espera había hecho mella en ellos y con un pequeño empujón acabarían montándoselo entre ellos, ya se sabe que cuando se pasa de pensar con la cabeza a pensar con la polla somos capaces de hace casi cualquier cosa jejeje. Bien, he aparcado en el parking que hay de camiones y he ido al baño, no me hace mucha gracia que me esté viendo alguien por cámara pero que se le va a hacer, como he visto los dos vehículos que estaban vacíos, he pensado que estarían dándole a la matraca en algún sitio así que he entrado al baño y allí estaban los dos, haciendo que meaban, mirándose la polla. Uno, el más mayor, se ha asustado y se ha alejado del otro un poco, el otro se ha quedado parado, me ha mirado y ha seguido meneándosela, decir que el aparato del muchacho era curioso. Bien me he colocado en medio y me he puesto a mear, ya os imagináis que los dos no han quitado los ojos de mi polla, también es verdad que no me he cortado nada a la hora de sacarla jejeje, pero no tenía cuerpo para polvos y tenía prisa, el curro antes que el placer ya se sabe y aún no se me había ido la putada de ayer en el restaurante, que le vamos a hacer, bien he acabado y me he largado. El más joven ha salido detrás y el tiempo que he llegado al camión ha vuelto ha desaparecer, al final paso lo que iba a pasar.
Por la tarde, de regreso a Santander para volver a cargar, he parado, con más tiempo, en el otro lado de la autovía, joder aquello era la leche, había un montón de tíos, unos en el coche, otros dando vueltas andando y algún coche sin conductor aparcado frente al edificio que alberga los aseos, he aparcado en la zona habilitada que está alejada del edificio y he entrado al baño, he de reconocer que estaba caliente, un par de tíos que me habían descargado el camión tenían un revolcón y, mientras descargaban, me he hecho una película de la leche con los dos al tiempo. Bien he entrado y, como siempre que he parado ahí pienso que entro en un bar del oeste, las puertas son de esas que se abren en los dos sentidos, al fondo hay una barra que da a un terreno con césped que comunica el aseo de señoras con el de hombres y allí estaba un tío maduro, en chándal, apoyado pero mirando en dirección a los aseos individuales que están a la izquierda pero como hay una pared en el medio que separa los lavabos de los urinarios no se ven bien todos. El tío no se ha inmutado, estaba muy atento a lo que estaba mirando así que imaginé que habría alguien más en el baño, me he dirigido al urinario y ante mi sorpresa, he visto mucho pero aún me sorprendo, en la última cabina, que estaba abierta, había dos tíos, uno de pie con los pantalones en el suelo y el otro agachado haciéndole una mamada, eso es lo que el otro miraba, no se han movido, ha seguido mamándosela y el que estaba de pie mientras le empujaba la cabeza con la mano me ha invitado a acercarme, la verdad que después de la película que me había montado la situación se tornó morbosa, pero, como os he dicho antes me sigo sorprendiendo y en momentos así me bloqueo y sobre todo cuando el paisano que estaba apoyado en la barra se ha acercado con ganas de mambo, me he quedado hasta que le ha dado la vuelta para encularlo, como veis da igual que haya cámaras o que pongan cualquier cosa somos la leche, no nos cortamos, al final joderemos los sitios, habremos sido nosotros que conste.
Bueno, esta noche he quedado para cenar con uno de los que me han reclutado para escribir en la Web que vive aquí, espero que me lleve a uno de los sitios con más vicio que conozco, no se puede ir en camión, si así fuera mañana os contaré.
jueves, 23 de abril de 2009
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